Si hay algo en lo que destaca Devolver Digital es en traernos propuestas únicas, muy originales e incluso irreverentes. Todos los juegos de la editora estadounidense son realmente únicos y esto es algo que, con el paso de los tiempos se ha ido acentuando. Son muchos los títulos los que nos tiene preparado de cara al futuro, algunos incluso los pudimos conocer recientemente en su habitual conferencia anual. Pero hoy estamos aquí para hablar del último título que Devolver Digital ha editado; desarrollado por Nerial, desde hace algunas semanas ya podemos disfrutar del divertido y único Card Shark, un título de aventuras y puzles donde la clave será convertirnos en unos auténticos magos de las cartas, pero a base de hacer trampas.
Card Shark nos transportará hasta la Francia del siglo XVIII, aquí tomaremos el control de Eugine, un mesero que se gana la vida sirviendo vino a los opulentos y adinerados miembros de la nobleza y otras clases de alta cuna. Un día, mientras nos dedicábamos a nuestros quehaceres, conocemos a un peculiar personaje, el Comte de Saint-Germain quien raídamente establecerá una estrecha relación con nosotros.
El Comte de Saint-Germain es un habido jugador de cartas, conocido en todo el país, aunque también con una dudosa reputación. Mismamente, en el momento de conocerle, este nos embaucará con promesas de riquezas si le ayudamos a llevar a cabo una pequeña triquiñuela durante el juego de esa noche. Él será el primero que nos enseñe unos pequeños truquillos para hacer trampa en el juego de las cartas.
Pero la fortuna nos sonríe y el Comte pronto nos acogerá bajo su ala, presentándonos a Ireneo y el Mago, dos astutos estafadores que viajan junto al campamento de los Cascarots por toda la comarca, mientras estafan a la sociedad francesa. Desde aquí el juego va ganando en profundidad y su argumento se vuelve incluso más intenso, haciendo que cada vez nos veamos las caras con jugadores más experimentados, pero también sumergiéndonos en una trama de conspiraciones que llega incluso a las más altas esferas de la sociedad francesa.
Y todo esto es solo una pequeña parte de lo que nos espera en Card Shark. Nerial, desarrollador también del apasionante Reigns, nos presenta con este título una premisa muy interesante que construye su argumento en base a las trampas. Y es que precisamente, a lo largo del título, aprenderemos a ejecutar diferentes argucias mientras conocemos las peripecias de ese mesero que un día decidió cambiar si destino.
Si el trasfondo de Card Shark nos resulta interesante, su jugabilidad no se queda atrás. El título toma como base unas simples partidas de carta, pero lo hace de una manera tan original en el que deberemos intentamos hacer trampas sin que nos pillen. Para esto tendremos que ir utilizando los diferentes trucos que vayamos aprendiendo durante el desarrollo de la partida.
Pero antes de introducirnos en esos duelos de cartas, tenemos que hablar de otras mecánicas que hacen de Card Shark el maravilloso juego que es. Bajo todo ese trasfondo de duelos, nos encontramos con un título que toma los point & click y las aventuras graficas de desplazamiento lateral como base. Durante los momentos que tomemos el control de Eugine, podremos desplazarnos por el escenario, recoger diferentes objetos y hablar con los diversos personajes que vayamos encontrando, de esta manera se irá construyendo la historia e iremos avanzando por su trama.
Profundizando en sus mecánicas jugables, llegamos a las partidas de cartas, sobre esto se construirá el juego. No es que en Card Shark podamos disputar partidas de carta al uso, aunque es mejor si conocemos las reglas del juego de antemano, sino que más bien estos enfrentamientos se presentarán como diversos minijuegos en los que tendremos que utilizar diferentes mecánicas para ganar a nuestros riales, eso sí, haciendo trampas.
Pero hacer trampa no será fácil ya que tenemos que estar muy pendientes de todo en el escenario, cosa que puede resultar desafiante, y también muy estresante. En Card Shark podemos aprender un total de 28 estrategias diferentes y de lo más variadas para desplumar a nuestros rivales. Estas van desde pruebas de ingenio o de memoria hasta otras que requieren más atención.
Por citar algunas, en los primeros compases del juego deberemos chivar a nuestro compañero las cartas de su rival haciendo diferentes movimientos con un trapo en la mesa mientras servimos el vino. También, por ejemplo, tenemos otras estrategias que consistirán en doblar algunas esquinas de cartas, marcarlas, barajarlas de una manera específica o incluso esconder algún naipe en nuestra manga para usarlo cuando lo necesitemos.
Pero hacer trampas no serán sencillo y tendremos que tener cuidado con no ser descubrirnos. El juego nos presentará una barra que medirá el nivel de sospecha de nuestros adversarios; fallar un movimiento, tardar demasiado o dudar hará que el indicador vaya aumentando y, si este se completa, seremos descubiertos y se acabará la partida.
Conforme vayamos avanzando iremos desbloqueando nuevas estrategias, lo que dará una variedad inmensa al título. También iremos visitando nuevos lugares y mantendremos conversaciones muy interesantes con los diferentes personajes que conozcamos, lo cual hará avanzar la trama. De esta manera, acompañaremos a Eugine por este turbulento periplo durante unas cinco horas de juego, aunque es muy rejugable y divertido, por lo que no es de extrañar que, una vez completada la partida, volvamos a por más.
Card Shark es, a nivel artístico, una auténtica maravilla. Posee una esencia única que se transmite como si fuera un cuadro en movimiento. Los personajes con los que interactuemos, los escenarios y otros elementos que el diseñador Nicolai Troshinsky ha plasmado en el juego lo convierten en un título realmente original y único. La paleta de colores y el gusto artístico es una de las grandes señas de identidad del título y que entra rápidamente por los ojos, sumergiéndonos así en un mundo visual muy característico que consigue transportarnos hasta esa Francia del siglo XVIII de una manera bastante acertada.
En cuanto al rendimiento, en nuestro caso hemos podido disfrutar del título en Nintendo Switch y, aquí, funciona de maravilla. Los tiempos de carga son correctos y el título se presenta estable en todo momento, tanto en el modo sobremesa como en el portátil.
La banda sonora en Card Shark terminan de conformar ese aura tan mágica y única del título. Los arreglos instrumentales y su melodía casan perfectamente con las situaciones que estamos viendo y consiguen situarnos a la perfección en esa escena de acción que se podría vivir durante las partidas de cartas en esa Francia del siglo XVIII. Junto a esto, señalar que el juego nos llega con subtítulos en castellano, por lo que podremos seguir a la perfección el argumento de la nueva obra de Nerial.
Card Shark es un título único y original. La última obra de Nerial es una experiencia muy disfrutable y que pocas veces se ha visto en el mundo de los videojuegos hasta hora. La forma en la que nos plantea jugar a las cartas, o más bien, hacer trampas a las cartas, es realmente ingeniosa, pero también puede resultar engorrosa y desafiante. Pero lo que prima en Card Shark es la diversión, y es que estamos ante un juego muy divertido que nos presenta algunos giros de guion bastante interesantes y que tiene un humor muy característico, con el cual disfrutaremos mientras acompañamos a Eugine en esos duelos de trampas.
Card Shark ya se encuentra a la venta en formato digital para Nintendo Switch y PC.
Hemos realizado este análisis gracias a un código para Nintendo Switch proporcionado por Cosmocover.
Deja una respuesta