Durante las diferentes generaciones de consolas de Nintendo, nos ha podido parecer que la compañía japonesa tiene ese defecto de dejar olvidadas algunas de sus grandes IP´s y que no dejan de ser pedidas una y otra vez por los fans; sagas como F-Zero, Star-Fox o Kid Icarus entre las más famosas y otras con menos historia en la empresa como Golden Sun, son siempre tendencia cuando se anuncia un Nintendo Direct. Pero también es cierto que la Gran N tiene la virtud de resurgir una de estas sagas de forma espontánea, llegando a suponer un gran impacto.
En este último caso tenemos que señalar nombres como lo visto por Metroid, la saga protagonizada por Samus que, en los últimos años, está viviendo un auténtico renacer gracias a los títulos desarrollados por Mercury Steam y por el remake de Prime. Pero la franquicia de la cazarrecompensas no es la única y es que, después de ser anunciado el pasado año y enfrentarse a un enorme retraso en su lanzamiento, el remake de Advance Wars ya se encuentra a la venta desde hace unos días y llega en un pack que contiene sus dos juegos, con una puesta al día sorprendente.
Nuestro primer protagonista es Andy, un joven mecánico que está empezando como comandante en el ejército de la nación de Orange Star. De repente vemos como las relaciones entre esta nación y las otras vecinas se han tensado debido a unos ataques realizados por el ejército de Orange Star. A partir de este punto y a través de una serie de escaramuzas vemos como no todo es tan sencillo y que hay alguien en las sombras que busca que las distintas naciones entren en conflicto.
Esta sería la premisa del primer juego de la saga para aquellos que empiezan de nuevo. No queremos hablar mucho de la segunda entrega pues es una continuación directa y podríamos meter la pata soltando algún spoiler. Sin entrar en más detalles diremos que nos encontramos con una historia sencilla, con personajes muy buenos y puros y con otros malvados sin motivo, simplemente lo son y punto.
Advance Wars es un juego de estrategia por turnos basado en movimientos por casillas. Es algo muy reconocible de otra de las sagas insignia de Nintendo, Fire Emblem. A diferencia de este último, Advance Wars no cuenta con ningún tipo de progresión de unidades o componente de rol. Nuestras unidades son las que son y no podemos mejorarlas de ninguna manera. Esto lejos de ser una desventaja grande es en realidad su mayor virtud pues nos pone en una situación de tú a tú con el enemigo y se basa más en cómo jugamos que las horas que le echemos al juego.
Las unidades son diversas y cada una tiene unas características, fortalezas y debilidades. En este sentido todo se siente bastante balanceado. Podemos conseguir una flota de cazas que pueden patrullar los cielos destruyendo todo bombardero o helicóptero que encuentren, pero estas unidades no pueden usarse contra unidades de tierra y son extremadamente débiles contra misiles aéreos o unidades antiaéreas. Las unidades de tierra tienen poca movilidad a nivel de casillas que pueden moverse, pero lo compensan siendo las únicas que pueden atravesar ríos o montañas. Esto es así con cada unidad, lo cual incita a que el jugador intente tener un ejército lo más diverso posible y no focalizarse solo a un tipo de unidad.
El escenario también es importante a la hora de situar nuestras tropas. Dependiendo de la zona en la que estemos gozaremos de una bonificación de defensa contra los ataques. Las ciudades nos darán más protección que dejar a nuestras tropas en un bosque, y el bosque será mucho más recomendable que pararnos en un terreno llano donde seremos un blanco fácil. Esto también se aplica al enemigo, así que debemos asegurarnos de donde atacar pues, aunque tengamos la ventaja táctica el escenario puede dar al traste con nuestra ofensiva.
Las unidades tienen unos requerimientos en cuanto a la cantidad de munición y de combustible. Si nos quedamos sin combustible en un tanque este quedará parado y no podremos moverlo hasta que reposamos a través de una unidad especial encargada de abastecer a otras. Si paramos la unidad en una ciudad conquistada por nosotros no solo recuperaremos provisiones, sino que podremos recuperar algo de vida en cada turno. Especial cuidado con unidades marítimas y aéreas. En primer lugar, que para recuperarse deben ir a un puerto o aeropuerto respectivamente y segundo porque si nos quedamos sin combustible perderemos la unidad al hundirse o estrellarse.
Si disponemos de una fábrica, puerto o aeropuerto podemos crear nuevas unidades dependiendo de los puntos que tengamos en ese turno. La cantidad de puntos que conseguimos dependerá de las ciudades conquistadas. Para conquistar las ciudades tendremos que llevar una unidad terrestre y darle a la opción de capturar. Dependiendo de la cantidad de vida lo haremos de forma más rápida o lenta. La mecánica de capturar también se aplica a las demás infraestructuras haciendo especial hincapié en la capital de cada jugador, que si es capturada se considera derrota o victoria inmediata.
Hay distintas formas de ganar las partidas; capturar la capital del enemigo, capturar cierto número de ciudades, eliminar todas las tropas enemigas, etc. Justo a esta variabilidad de unidades, tenemos unos cuantos OJ con una habilidad especial. Andy puede recuperar parte de la vida de todas las unidades, Máx da mayor fuerza a los tanques y Olaf provoca una ventisca que dificulta el movimiento de las unidades enemigas.
Todo esto comentado se aplica al primer juego. En la segunda parte tenemos ciertas variaciones que dan mucha más variedad al título; los OJ tienen una variante más fuerte de su poder, existen nuevos tipos de unidades, hay diferentes requerimientos para ganar, etc.
Aparte de los distintos modos de dificultad para hacer más accesible el juego, contamos con la posibilidad de reiniciar nuestro turno si hemos cometido un error involuntario o no hemos tenido en cuenta las variables del campo de batalla.
También debemos resaltar las partes algo más tediosas. En primer lugar, son las animaciones, no es que no están bien trabajadas, pero en una partida que puede durar una cantidad considerable de tiempo ver una y otra vez las animaciones, sobre todo cuando activamos un poder puede resultar en exceso repetitivo y cargante. Destacar también como el juego a veces te lleva por donde él quiere. Hay misiones que solo pueden ganarse siguiendo unos pasos concretos, sino será imposible ganar. Esto resta mucho del componente estrategia del juego.
No debemos dejar de resaltar los diferentes modos fuera de las dos campañas. Tenemos modo multijugador tanto online como offline. Es uno de los componentes más atractivos del juego, sin embargo, debemos dar un tirón de orejas a Nintendo por ciertas medidas que podrían haberse solventado fácilmente. El modo online da la sensación de estar algo capado, pues solo podemos jugar online con personas que estén agregadas a nuestra lista de amigos. Esto es desaprovechar un gran potencial pues el juego cuenta con un editor de mapas que nos permite establecer diferentes reglas y escenarios, pero al no existir sistema de emparejamiento o una forma de compartir estos mapas con la comunidad nos da la sensación de abandono en este aspecto.
Estéticamente no podemos criticar nada, como viene siendo habitual en los juegos de Nintendo. Tenemos unos diseños muy cuidados y bonitos en cuanto a nivel de unidades, cada facción tiene las mismas unidades, pero con diferentes variantes para poder diferenciar bien los ejércitos. Se ha abandonado la estética pixel art y se ha optado por una estética que se asemeja a juguetes de juego de mesa, algo parecido a lo visto en The Legend of Zelda: Link ‘s Awakening.
Las animaciones de los OJ también están muy cuidadas, pero como hemos comentado anteriormente pueden hacerse muy cargantes cuando ya las hemos visto unas cuantas veces.
La banda sonora ha sido rehecha de nuevo partiendo del original, todas las canciones originales tienen nuevas versiones instrumentales. Los sonidos están muy bien escogidos como suele ser lo normal en los juegos de Nintendo. Por último, mencionar que viene totalmente doblado al español y traducido.
Advance Wars 1+2 Re-boot Camp se postula como un imprescindible para los amantes de estrategia en Switch, un género no muy explotado en la consola. Tenemos un remake que tiene todo lo que traían los originales de GameBoy Advance y con ciertos añadidos como la inclusión de un modo online y un apartado estético impecable.
Advance Wars 1+2 Re-boot Camp ya se encuentra a la venta en formato digital y físico para Nintendo Switch.
Hemos realizado este análisis gracias a un código para Nintendo Switch proporcionado por Nintendo España.
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