Repasamos este último capítulo de esta octava temporada de The Walking Dead.
El final de temporada a estado protagonizado por una sucesión de hechos que ha dividido a los fans. A unos les ha gustado y a otros les ha decepcionado. El caso es que han sido dos largas temporadas esperando este gran momento, esta gran batalla entre el grupo de Rick contra el de Negan. El problema viene cuando la esperada batalla se queda reducida a un golpe de efecto al final, jugando en contra de las expectativas.
Este último episodio deja colgando demasiados flecos y acusa una falta de espectacularidad que, si bien tiene cierta lógica en cuanto al mensaje con que nos quiere dejar la serie, suena insuficiente en el conjunto de una temporada que triplicó la acción de la anterior. No hay tanto una gran batalla como la resolución de un golpe de efecto que, por mucho que llene a un nivel estratégico deja resuelta la contienda en un minuto, dejando el peso de la lucha en el esperado enfrentamiento de Rick y Negan.
Resulta difícil de creer que los buenos hayan conseguido lograr la victoria tan fácilmente ya que si no fuera por Eugene, Negan habría matado al padre Gabriel y los Salvadores habrían tenido ventaja contra los aliados de Hilltop. Así es, Eugene saboteó las municiones y todos los que dispararon resultaron heridos, incluido Negan. La batalla contra los que quedaron fue muy breve y solo quedó el esperado encuentro cara a cara entre Negan y Rick. Este esperadísimo momento aunque breve es intenso ya que ocurre lo mismo que en el comic, pero usando la carta de Carl para forzar la situación. En ese momento decisivo Rick le corta la garganta a Negan después de mantener una conversación sobre el futuro y finalmente, opta por dejar con vida al villano.
Luego vemos a Maggie, quien nadie más que ella deseaba la muerte de Negan. Michonne la detiene y ella simplemente se desploma de dolor. Más tarde nos damos cuenta que Maggie cree que esta decisión de Rick es equivocada. Ella reúne a Jesus y a Daryl, y les expresa que el que Negan siga con vida es un error, un error de Rick y Michonne, y que dejarán que las cosas se asienten para ajustar las cuentas.
Una cosa que no tiene sentido de ese hecho es que Jesus esté de este lado, sabiendo lo pulcro que se había vuelto, diciendo a Morgan que no siempre era necesario matar. Puede que la siguiente temporada se base en esta trama, pero cuesta creer que solo por este hecho, personajes como Daryl y Rick se puedan enfrentar de esa manera.
Aparte, también vimos otro giro de guion, las chicas de Oceanside llegaron en el último momento a apoyar la defensa de Hilltop. Algo que se veía venir desde lejos, dejando un momento muy intrascendente en el capítulo. Esto es un fallo muy gordo porque se ha invertido tanto tiempo a ese hilo que su ayuda cae sin mucha gracia. La octava temporada si bien ha tenido sus repuntes y sus momentos claves sí que se ha tomado bastantes licencias y llegó a ser lenta y hasta cansina, y esta era una de esas tramas que bajaban el ritmo de la serie.
Después de vencer a Negan, casi todo el capítulo se fue en reconstrucciones y nuevos vientos para los que siguen con vida en ese mundo de muertos vivientes. Vemos a Daryl exiliar a Dwight y a este ir al viejo refugio que compartió con su esposa; a los Salvadores rendidos trabajar afanosamente; a Hilltop preparándose para mejorar; a Gabriel recuperando su fe; a los pobladores del Reino de Ezekiel regresar a este junto a Carol. Y también vemos a Morgan ir con Jadis (descubrimos su nombre de verdad, Anne) para invitarla a la nueva etapa de Hilltop. Morgan se queda allí y servirá de nexo con Fear The Walking Dead. Y finalmente Rick y Michonne hablan con Negan y le explican cuál será su futuro: permanecer preso y con vida para que vea cómo sí es posible hacer las cosas de una forma distinta.
Un final que nos deja un buen mensaje que hubiese sido mejor si todo lo anterior estuviese bien ejecutado. No es normal haber tenido a todos los espectadores pendientes de una gran batalla final durante un año para luego acabar así. Si bien en el comic acaba igual, por medio hubieron grandes escenarios con mucha acción y varias muertes importantes e impactantes.
En fin, este ha sido el episodio final de la octava temporada. Así con este agridulce y tibio cierre ‘The Walking Dead’ se despide hasta el otoño. Solo nos queda agradecer a los lectores de estos recaps, quienes hemos recorrido este mismo largo camino que ha dejado esta serie.
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